Me enorgullece mi labor, es lo más importante.
ENSEÑAR CONOCIMIENTO ES UN DON
Toluca Edo. De México.- El día 14 de mayo se llevo acabo una celebración previa del día del maestro en el preescolar “Profra. Eva Samano de López Mateos”, donde algunos de los alumnos participaron con bailables, poesías y algunos cantos para dar muestra de cariño a sus profesores.
La profesora Clementina Blanquel Domínguez quien ya es jubilada acudió a la celebración ya que uno de sus nietos estaría participando y además por que ella laboro más de 30 años en tal institución.
“Recuerdo muchas cosas cuando vengo aquí, son muchos años, muchas generaciones, muchas vidas; en lo particular como persona creo que el ser maestra o maestro no es una labor del todo fácil al contrario conlleva muchísima responsabilidad por que tienes muchas vidas en tus manos las cuales debes procurar guiar siempre por buen camino” aseveró Domínguez
Así mismo comento que en los años que trabajo dando clase aprendió que cada generación es distinta y requiere de cosas diferentes por que cambian ciertas cosas los valores que dice se transforman, el pensamiento de los niños cambia dependiendo de la educación recibida en casa motivo por el cual menciono un docente debe estar en constante preparación, un maestro nunca deja de aprender es doble trabajo.
Dijo también que el trabajar dentro de esta área del aprender tiene mayor dificultad conforme pasa el tiempo; “para mi si el dar clases en un preescolar es difícil por que los niños llegan pequeñitos de 4 años todavía piden se les lleve al baño, se les abrochen los zapatos, o ya se durmieron en el suelo, etc., creo es mucho más complicada la labor que desempeñan mis compañeros de niveles superiores primarias, secundarias, prepas sobre todo” puntualizó Blanquel Domínguez.
La profesora tiene la firme idea de que lidiar con un adolescente es un mayor trabajo que el de cuidar a un pequeño; compartió una experiencia que dice nunca va a olvidar: “yo tenía una alumnita que siempre estaba triste, que no jugaba con nadie, que se apartaba de los demás en fin; la niña sufría de violencia física por parte de su padrastro y la mamá ni una palabra, yo trataba de ayudarla le dedicaba más tiempo y sabes cual fue mi sorpresa al siguiente año que la pedí en mi grupo y que ella apenas comenzaba a escribir pues su primer escrito no fue ni mamá, ni papá fue: gracias maestra”.
Dijo como esa experiencia a tenido muchas buenas y malas; sin embargo tiene la firme idea de que de cada niño aprendió algo y que aún conserva todas y cada una de las fotografías de sus generaciones, pues hay alumnos a quienes no olvida y que muchas veces a llegado a ver crecer y triunfar en la vida aun que ellos ya no la recuerden.
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